La importancia de la cultura de seguridad

Miguel Ángel Rodríguez Martínez

La cultura de seguridad es el conjunto de elementos propios de una sociedad que incluyen pensamientos, creencias, valores, actitudes, conductas y costumbres. Determina el compromiso individual y colectivo y genera las condiciones necesarias de protección y prevención de daños a personas, grupos y comunidades.

Los niveles de inseguridad y violencia que se viven en diferentes regiones del país, así como la información que diariamente se difunde en medios de comunicación y redes sociales sobre la incidencia delictiva, deberían ser motivo suficiente para tener un nivel aceptable en la cultura de seguridad.

¡No es así! Seguimos viendo actitudes y patrones de conducta que no están encaminadas a generar hábitos de seguridad, muestra de ello es lo siguiente:

* Son constantes los pronunciamientos políticos por parte de las autoridades de los diferentes órdenes de gobierno en los que se busca atender la cultura de seguridad, haciendo conciencia e involucrando a la sociedad en acciones específicas de seguridad ciudadana.

* En la práctica se observan únicamente pronunciamientos, no hay campañas robustas y permanentes de información y educación en seguridad, no se involucra a la sociedad en eventos destinados a incentivar la cultura de prevención del delito, no se utilizan estos eventos como centro de andamiaje para aplicar políticas integrales de seguridad ciudadana.

* También se percibe que las inversiones que se hacen en materia de seguridad no atienden la prevención y se aplican para reaccionar ante sucesos que comprometen a la seguridad de ciertos sectores sociales.

* Por su parte, la población refleja ignorancia en materia de cultura de seguridad, hay sectores sociales que desconocen los peligros a los que están expuestos en su comunidad, muchas personas descuidan su seguridad personal, otras, hacen caso omiso a las recomendaciones de seguridad, transitan por lugares aislados y oscuros, ignoran los protocolos para hacer denuncias cuando son víctimas de algún delito.

* También hay casos en los que parte de la población no le da la importancia que requiere la seguridad, la discrimina o menosprecia, muestra actitudes soberbias cuando se le trata sobre este tema y en otros casos, señala a la autoridad como la única responsable de proporcionarle los medios de protección personal y la de sus bienes.

La combinación de estos factores representa un factor de riesgo para consolidar una cultura de seguridad en la sociedad mexicana. Mientras esto no cambie, la población seguirá estando expuesta a diferentes peligros que puedan dañar su integridad física, su seguridad moral y psicológica, así como la protección de sus bienes y patrimonio.

Para que la cultura de seguridad pueda evolucionar de manera positiva, debe haber una comunión entra la autoridad y la sociedad, se debe garantizar la cooperación mutua en la aplicación de las buenas prácticas de seguridad ciudadana, se le debe educar para generar hábitos de seguridad y se debe mantener informada sobre los problemas coyunturales y estructurales existentes, así como de los resultados obtenidos en la aplicación de las políticas públicas implementadas.

Hagamos de la seguridad, una disciplina, una norma de conducta y un principio de observancia.

miguel@marmgsc.com