El proceso electoral y la seguridad
Miguel Ángel Rodríguez Martínez
Este noviembre del 2023, representa el inicio formal de las precampañas electorales a nivel federal, y Jalisco es uno de los nueve Estados en los que habrá elecciones para gobernador, diputados locales y presidentes municipales. Si bien son cuatro meses para que los partidos y frentes lleven a cabo sus procesos internos, es un hecho que en la práctica ya mueven sus plataformas políticas.
Durante todo el proceso electoral, los aspirantes a los cargos de elección hablarán de diversos temas: destacarán los logros obtenidos en sus cargos públicos, cómo beneficiaron a los sectores sociales de mayor marginación, cómo generaron ingresos, inversiones y estabilidad económica, cómo promovieron una mejor educación y cómo ayudaron a consolidar el aspecto cultural; es lógico que evitarán hablar de sus errores o en el mejor de los casos, los justificarán con argumentos inverosímiles. También veremos por parte de sus contrincantes, cuestionamientos, acusaciones y porque no, hasta denuncias de supuestos actos deshonestos, de corrupción e involucramiento en actos ilícitos.
La sociedad será el auditorio de las campañas propagandísticas que se diseñarán mediante el empleo de técnicas tradicionales, combinadas con las nuevas tecnologías e inteligencia artificial y serán difundidas de manera masiva e invasiva, a través de los medios de comunicación y redes sociales, buscando en todo momento, consolidar el apoyo de sus militantes, pero, sobre todo, atraer la atención de los ciudadanos que no tienen militancia partidista y que será prácticamente el objetivo final de las campañas.
Hay un tema que resultará clave en el proceso electoral, es de suma importancia y causa mucha preocupación en la población, hablamos de la seguridad. Un tema que resulta contradictorio en el discurso político, las estadísticas y en los hechos. Es contradictorio, porque las autoridades de los tres niveles de gobierno, en sus informes resaltan una disminución en los índices delictivos pero sus propias estadísticas y las del sector privado muestran datos contradictorios, y lo más relevante es que la sociedad percibe inseguridad en su comunidad, refiere que los delitos van aumentando y no confían en los integrantes de las fuerzas de seguridad pública, por considerarlos deshonestos.
De la forma en la que se aborde el tema de seguridad en el proceso electoral, llamará la atención del electorado; hablar de datos duros con resultados concretos y argumentos verosímiles, así como la empatía que se logre con los integrantes de grupos de víctimas de delitos, será fundamental para garantizar certeza o certidumbre y la propuesta de una política pública integral de seguridad ciudadana, generará confianza, y en el mejor de los casos, el apoyo requerido, sobre todo en los temas de robo, desaparición forzada, homicidios y feminicidios.
Como ciudadano espero que las campañas electorales no sean tormentosas para los electores y que el tema de seguridad sea atendido de manera congruente y responsable, que los aspirantes tengan la sensibilidad necesaria con las víctimas de los delitos y que hagan propuestas de seguridad ciudadana que sean holísticas, polivalentes y viables para que la población tenga garantizados sus derechos fundamentales y pueda disfrutar de una comunidad segura.
F Cruz C
/
Excelente nota!
noviembre 19, 2023