Los efectos del cambio climático en México

Miguel Ángel Rodríguez Martínez

El clima se representa por las condiciones atmosféricas que prevalecen en las diferentes regiones de la tierra. Son consecuencia de las temperaturas, la presión atmosférica, los vientos, las lluvias, la nubosidad y la humedad.

La forma y distribución de los Continentes, su relieve, latitud y altitud, así como las corrientes marítimas y de los vientos, generan alteraciones naturales y periódicas en la atmósfera y modifican de manera natural, los elementos climáticos.

Con el paso de los años, el cambio climático se ha visto afectado y alterado por la actividad humana, provocando variaciones y cambios más constantes, agresivos y extremos en los elementos del clima, por lo que se ha convertido en una preocupación de la comunidad internacional.

México no ha estado al margen de los efectos del cambio climático. Estamos en la fase final de un periodo de sequía extrema en nuestro país. Datos de CONAGUA, refieren que 70.76% del territorio nacional padeció sequías en 2024. Hablamos de un porcentaje de 21% más alto que en julio de 2023.

La semana pasada, la tormenta tropical “Alberto” entró al Noreste del país y en tan solo 48 horas, de acuerdo con datos de la propia CONAGUA, el Estado de Nuevo León acumuló 282.55 milímetros de agua como consecuencia de la precipitación. Esa cantidad de agua equivale a 164 días de lluvias y a 45% del agua que cae en todo un año en ese Estado del Norte del país.

Por dicha razón, el cambio climático debe ser considerado como un fenómeno peligroso y como una amenaza potencial para nuestro país, ya que en la forma en la que se manifieste, generará fuertes y diversos daños, como son: devastaciones, afectaciones a la salud, destrucción de infraestructura y productos agropecuarios, escasez de alimentos, desplazamiento de comunidades e inclusive, el colapso de los servicios básicos.

Ahora hagamos una valoración interna de nuestro país, ya que presenta varias limitaciones que lo hacen vulnerable ante los efectos del cambio climático: unas son naturales y otras provocadas por el hombre.

1. A) Naturales: Son consecuencia de la propia geografía de su territorio y de la fragilidad que presentan sus ecosistemas para contener los cambios drásticos de los elementos climáticos.
2. B) Provocadas por el hombre: En este rubro destaca: 1) La falta de interés y compromiso de las autoridades para considerar el cambio climático como una amenaza potencial, 2) La escasa aplicación de políticas ambientales, 3) La falta de involucramiento de la sociedad civil en estos temas, 4) El insignificante porcentaje estadístico registrado en el uso de las energías limpias y renovables, 5) La carente cultura de responsabilidad social para generar un impacto favorable en el medio ambiente, 6) El uso indiscriminado y la contaminación del agua, 7) La deforestación agravada, 8) La pobreza y la desigualdad social.
3. C) Los fenómenos naturales que recientemente afectaron a nuestro país, permitieron observar que sus efectos demoledores, obstaculizaron la fase de auxilio a las comunidades afectadas y también están retrasando su recuperación. Esto es reflejo de las limitaciones que tiene el hombre ante los efectos de la naturaleza y por simpatía se manifiesta en la aparente incapacidad de las autoridades de los tres órdenes de gobierno para atender este tipo de fenómenos.

Podemos concluir lo siguiente: I) Las condiciones atmosféricas actuales seguirán provocando de manera periódica y drástica, cambios climáticos en las diferentes regiones de México, II) Las condiciones de la infraestructura de gobierno y de la propia sociedad no representan una fortaleza para contener sus efectos, III) Al presentarse estos fenómenos naturales, el riesgo que se corre el alto y el impacto seguirá siendo crítico, como hasta la fecha ha sido, IV) Se requiere de mucho trabajo, pero sobre todo es necesaria la participación del Estado y de las autoridades locales para que, en los ámbitos de su competencia, diseñen y apliquen políticas y estrategias sustentables que den resultados a mediano y largo plazo. De esto depende en gran medida la seguridad de la sociedad y el fortaleciendo del desarrollo nacional.

Para los Estados que aún no se han visto afectados por las lluvias de este año, como es el caso de Jalisco, estamos a tiempo para generar acciones preventivas que, de manera conjunta con la sociedad civil, ayuden en primer tiempo a prevenir y reducir los posibles impactos de las precipitaciones pluviales y en segundo tiempo, actuar con oportunidad y eficiencia para contener sus efectos.

Hagamos de la seguridad, una disciplina, una norma de conducta y un principio de observancia.

miguel@marmgsc.com